El encanto de la Noche...
La Noche… ¿Qué poeta no ha escrito sobre la Noche? Tanto en la desesperación de un insomnio y vigilia, como en aquellas noches estupendas cuando cierras los ojos y los abres en pleno día; como si el tiempo no hubiese transcurrido; con cuerpo, mente y alma completamente descansados… Es una muerte pequeña... Ni hablar de las interminables noches de amor Eros “al aire libre”; al abrigo de un perfumado pino silvestre; hasta que nos toma por sorpresa la aurora. O simplemente yendose de farra… Igualmente las noches se prestan para fechorías y delinquir… En el principio: “fueron separadas la luz de las tinieblas”; inclusive el estado fisiológico de nuestros cuerpos cambia de un estado a otro… o sea del día a la noche y viceversa. No nos olvidemos de las grandes galas nocturnas; donde mujeres exquisitas se colocan sus mejores perfumes y joyas, buscando perfección. Buscando fascinar a los hombres… o a sí mismas… En fin, la noche es encantadora. Pero después q