Construir...
Construir…
Y no
destruir… que lo que no tiene basamento verdadero, tarde o temprano se caerá en
los fosos del olvido profundo… quedará para la historia, eso que tanto fue
anhelado, o que tantos dolores de cabeza causó… que tantas víctimas: unas en contra…
otras a favor… tenía secuestradas… Ya todo quedará en el pasado más remoto… solamente un olvido y nada más…
Y
como esas cosas caen por su propio peso, lo que hay que hacer es dedicarse a
construir, a sonreír… a estar agradecido y a volar… con tu placer preferido… dedícate
a construir y no a destruir… porque quien destruye termina siendo devorado por sí
mismo… y eso es una cosa horrenda…
Construir
un destino nuevo y saludable para el Alma.
Oh, bendita Alma… que descansas tranquila por las veredas de las noches
de Shabat… orando enfrente de tus velas… rogando por tantas cosas bonitas ante
Hashem… No te canses, yo sé que no lo haces… pero te lo digo como advertencia…
para que no caigas en descuidos porque tu Emuná es grande…
Oh Alma mía… dile a D-s en tus sueños… que te cobije y te revele muchas cosas interesantes relacionadas con Él, y solo con Él: que harás durante el día… y así todo saldrá bien… todo saldrá bien… A pedir de boca…
Ya viene el tiempo de lo
Sagrado… lo profano queda atrás… en el olvido… y sólo la luz te acompañará
junto con tus ruegos benditos… descansa, corre, grita en tu mente… grítale a Hashem…
que Él te ama muy bien… muy bien… y dale gracias al despertar…! Que lo está
esperando… Amén…